Versos
poema de Sergio Pincheira Vergara
Que no es el dolor el arma para vivir y el asesinato de tu sangre la mano para surgir, pararte y a tu gente hacer feliz.
A ratos divertirse ya que su tiempo es su templo, sólo debes construir uno tú para a ellos darle luz.
Y me despido porque se me descargará el celular a ver qué desafío mañana llegará.





Comentarios & Opiniones
Excelente obra, sencilla y compleja a la vez, un saludo amigo.
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