El mapa de la obediencia

El mapa de la obediencia

Desde niños nos entregan un mapa
dibujado por manos que no vemos,
un mapa donde los caminos ya vienen trazados
para que obedezcamos sin cuestionar,
un mapa donde la duda está prohibida
como si se tratara de un acto de rebeldía.

Nos envuelven la Navidad en blanco, verde y rojo
para que no escuchemos el engranaje del consumismo
girando detrás de un coro de villancicos;
la llaman época de amor, paz y reflexión,
pero huele más a mercado y a hipocresía.

Y en medio de ese escenario aparece él,
figura creada para salvar la Navidad: Papá Noel,
un mito vestido de rojo, de obesidad sonriente y barba blanca,
representación perfecta del consumismo,
que curiosamente entrega premios solo a los niños “que se portan bien”,
como si la inocencia
fuera una moneda que se gana obedeciendo.

Primera lección del sistema:
no pienses, compórtate;
no cuestiones, acepta;
el regalo solo llega
a quien baja la mirada.