Quererte es un salto al vacío

poema de Reyes

Quererte es un salto al vacío.
Convencido de la inminencia de la muerte decidí lanzarme.
Decidí quererte.
Quererte sin exigencias y sin apego.
Como quien ama la aurora o el mar o el sol o la luna.
Así es como decidí quererte.
Muriendo en cada despertar.
Floreciendo en cada saludo.

Han de venir los días donde te ame menos.
Han de venir las noches donde te quiera más.
Pero dudo que vengan los días en que te deje de mirar.
Como quien adora la aurora o el mar o el sol o la luna.
Como quien adora el pasado y el camino recorrido.
Como quien adora el cielo y sus nubes y sus estrellas.
He de amarte como se ama lo imposible:
Con fe y con devoción sin límites,
Como aman tus santos a su dios.

No será suficiente amarte con los ojos
Ni lo será amarte con las manos,
Tampoco lo será amarte con el alma
O con todos mis sentidos.
Pero por ahora solo puedo amarte con palabras,
Pues mis palabras son lo único que tengo
(todo lo demás carece de valor).
Así que he de amarte con mi voz,
Con mis letras con mi mirada y mi música interna.

Amaré tus cuentos y tus historias.
Así también tu pasado y tus memorias.
Atesoraré con celo tus tesoros
Aunque sean recuerdo de otro.
Querré como mías tus palabras
Y puliré con celo tus acentos.
Serán tus ojos mi guía y tu boca mi destino.
Y en tu pecho será mi descanso eterno.

Y saltar al abismo será mi trabajo.
Amarte en incertidumbre,
Quererte con fe en mi más grande duda.
Mirarte desde aquella cumbre
Caminar en el soleado sendero
De aquella dorada floresta donde te soñé.