Vayan, versos, vayan

poema de Piero Abanto

Que no vayan a nada
o que vayan a quien quiera tomarlos.
Ódienlos quienes tengan que odiarlos y que se refugie
el que, como muchos, ama en silencio.

Y qué importa que no sepa de qué van estos versos
nadie sabe de qué va lo que siente
y nadie siente que algún lado va
si no es nada lo que en su corazón pronuncie...
y en el amor, aunque jure marcar estas como mis últimas canciones
tal vez mañana quebrante lo que jure
¡deshonrado! … Y a mucha honra llamáseme entonces
Es que cuando sienten, no saben cómo viene
ni de dónde sale esa musa silenciosa
esa galante y misteriosa
esa que ha de ser la reina
cuya piel no es más que tersa tela caída de las nubes
y el revoloteo de mi competencia, las aves, resulta los rizos de ella
que se atrevieron a volar cerca y dejar su huella.

Es que uno cuando siente… simplemente lo reconoce
Así, sin explicaciones, ni motivos ni circunstancias
Así sin saber por qué lo siento
Así escogiendo a ciegas mil veces este experimento
Es mi mejor manera de saber que te siento.