A veces.

A veces!

A veces mirándo de reojo como quien no quiere la cosa.
Me observo minúscula ante la inmensidad de todo este universo.
Soy aprendiz, cargando emociones en la bolsa.
Comprando con mi vida que es mi tiempo pequeñas estrellas.
Y por fin me atreví a mirar al amor de cerca y entendí aquello de quemarse en la hoguera. Se hizo literal en mi ese deseo de primer beso, y amaneceres completos dejando huecos en la arena.

Y durante estos acelerados años cuando al final soy consciente de toda esta total inconsciencia que habita en mi y cohabita en todos nosotros cuando olvidamos promesas y nos deshumanizamos por falta de amor.

Todavía inalcanzable, como algo imposible.

Como si no pudiera reescribir el libro con tintas doradas y finales felices.

Como quien no apaga la luz para contemplar lunas llenas y rojas.

Hoy a pesar de ser tan en vano intento perseguir la eterna quimera.
Corriendo de tu mano buscando que sabe que cosa, mientras los pies siguen mojados.

Todavía en la espera, a ver si la marea me despierta y al final seguir caminando contigo, conmigo, ser nosotros por todos estos años.