El ombligo de mi monstruo

Cada monstruo anda con su sombra
esperando ver placer en pantallas vacías
Dándole de comer a la sombra un poco de maíz en forma de narciso
Nos llenamos de aire tratando de escupir alma en el andén,
porque ¿quién ama a alguien que no carga algo adentro?
Tenemos que fingir que no nos interesa ser recuerdo del recuerdo de una lucha.
Aparentamos un drama náufrago que llegó en balsa,
cuando en realidad pagamos el tiquete para que viniera en avión.
Porque lo necesitamos, lo queremos.
Maquillamos la nada con un poquito de algo intelectual,
y justificamos la vida con un sentido cósmico.
Qué mierda es darse cuenta que el puto sentido cósmico de respirar,
es un día dejar de hacerlo.
Somos todos monstruos que andan a hurtadillas manoseando la moral,
intentando parir crías que salgan sonriendo y con la fortuna a cuestas.
Qué lindo el niño, dicen unos.
Qué condón más roto, digo yo.
¿En serio cada vacío hay que llenarlo con un bebé?
Estamos todos rotos desde que tenemos ombligo.
El drama es el sentido que le encontramos al aire
para que nos cante canciones y sea algo más que cometa.
Una lágrima tiene un propósito cuando es vista.
Y cuando no, se transforma en pensamiento,
Luego en idea, luego en flores de reconciliación,
y luego vuelve a ser lágrima.
Todos somos monstruos,
con sombras ansiosas por ver un poco de sangre
que se parezca a la nuestra,
porque ¡qué lindo el dolor cuando se siente en otro!
A veces cansa ver la pena ajena
y entonces nos casamos,
El ángel más diabólico de cada cama es el amor.
Y lo sabemos.
Pero lo colgamos en el armario como el vestido bonito que nunca usaremos.
No lo botas,
porque es demasiado hermoso para que no sea tuyo,
pero no te lo pones, porque no es de tu talla.
Por eso cuando amamos
es tan difícil quitarse la braga y estar desnudo de nuevo.
Todos, somos sombras que ríen fuerte para fingir tener más que intestinos.
Que ocultan las virutas de las camas rotas
y que venden el amor al primer espejo enmarcado
¿Ahora entendés?
Por eso las carcajadas, el bullicio y las multitudes.
Por eso las mascotas y las fotos con brillantes muelas.
Por eso el amor.
Puta, por eso el amor.
Necesitamos testigos que nos digan lo felices que van nuestros respiros.
Necesitamos vernos con hoyuelos y no con lágrimas,
Nos carcome la necesidad de ser personas con dientes
y no monstruos con sombras.
Porque comemos mierda,
pero eructamos pollo.