Chau Señor invierno

Chau señor invierno
dueño y amo de las noches de neblinas,
tus barbas de escarchas ya se van desdibujando con el tiempo.
Emprenden tu viaje que nunca termina
hacia secas llanuras o talvez a hielos eternos.
El viento que soplaba cada vez más fuerte
reviviendo la maquinaria de los campos de molinos
guiando escuadrones de barriletes,
hoy cesa su marcha,pues ya ha reunido suficientes nubes,como una gran carroza esponjosa,que serán empujadas por sus fuertes soplos,cual fornido caballo envía a su destino a un valiente jinete.
Prepara tus maletas,repletas de hojas secas
para ir marchando por caminos alfombradosde ramitas pequeñas.
Llevate allí dentro todas nuestras tristezas,
las lágrimas y las penas que nuestras almas te han entregado,
por esos caminos encolumnados de extensas y largas arboledas,que a medida que te vas alejando van desvaneciendo tu figura,llevate las amarguras.
Pero por favor,dejanos los más gratos recuerdos Señor invierno,
de tardecitas en las que te enseñoreabas cual rey de las meriendas,
encoronado de gorras de lana,
bufandas tejidas por la abuela,
aquella que te ofrecía
ofrendas de ricos biscochuelos,tostadas,manteca untada y pan con mermelada.
En tu mano,tacita de té calentito
mostrando airoso tu galanura de tosco señorito,
con tu sobretodo que nos cubre y nos envuelve de tu helado y noble prestigio.
Adiós príncipe envuelto de nieblas
de las mañanas pocos visibles,
en tu rostro se vé un semblante de largas melancolías
que los más tristes cantos del más porteño tango
al penetrar tus oídos
te transmitían,
y con cada compas al son de bandoneones,guitarras y violines
muy lentamente tus cejas fruncian.
El ocaso ya va anunciando el fin de grises matices,
que hacían parecer pintoresco cuadros
las soledades de las calles vacías
que muy pocos lanzados a la aventura
se arriesgaban a transitarlas,
exponiendose a la interperie,enrojeciendo sus narices.
El sol que de tí se ocultaba anuncia el final de tu reinado
porque ya comienzan tiempos nuevos
te voy despidiendo,
hasta luego,hasta pronto,
en el próximo solsticio volveremos a reencontrarnos.
20/09/15