En el bosque de apamates me anamoré (I Parte)
Juan se apresura a la cita fijada.
Bailan en su contra las agujas del reloj,
Su pulcro calzado el taconeo perpetuaba,
El afán y la esperanza, la fe y la ilusión.
En el horizonte fija su mirada: ¿en dónde?
Como quien busca un sacro tesoro,
Algo empaña su corazón, ¿Qué esconde?
Cuando un silencio penetra el dulce decoro
El singular y regio bosque de apamates,
Inunda su tristeza, le envuelve en añoranza,
De aquella dulce doncella con diadema de oro,
Cual joya de diamantes brillando en lontananza.
Y no puede pensar que se enamora
Porque el amor a Cristo no puede quebrantar,
Cuando el negro vestir lo cataloga
El hombre de sotana que anhela santidad.
Mira el reloj. Se acerca la hora,
Su corazón sobresalta de miedos y desazón:
“¿Será que está?, ¿será que vive?
¿Por qué late medroso mi joven corazón?”
Ella dijo que vendría, como quien escribe:
“Juro por mi vida… juro por mi amor…”
Sabe que allí estará, que ella vendrá,
En silente batalla, será su contendor.
Caminará como fuerte guerrera vencedora,
A tan ruda enfermedad, cantando ¡Victoria!
Tres de la tarde, solo el bosque y la pequeña plaza,
No hay lluvia de flores anunciando la gloria
Es un arrebato de alegría y de esperanza
De verla en el mismo lugar, en la silla forjada,
Sonriéndole y dándole su confianza
A su indigno héroe, de quien está enamorada.
Juan se sorprende del silencio de los apamates
En su mano un rosario, y con él su sotana,
La gente lo veía pasar presuroso y fragante
Ante un espectáculo que al caserío engalana:
Es la lluvia de flores a las tres de la tarde
Donde el santo espera un rocío de mañanero,
Ante el amor silencioso que con él arde,
Encantadora liturgia que entona Faustina plañidero.
Se sienta en la bendita forjada, Pensativo y angélico
Nadie está a su lado, sólo un recuerdo que danza,
A "Potrero de las Casas" rememora aquel día
Abre páginas del pasado en su vieja añoranza...
(continuará...)
Comentarios & Opiniones
ESPERO LEER LO QUE QUEDA, APACIBLE LETRAS Y MUSICALIDAD SUAVE. DIOS LO BENDIGA...
Un poco de misterio no está mal, continuaré leyendo tu enigmático escrito. Un gusto visitar tu bella composición.