Era otra historia, pero ocurrió esta

Recorro mil kilómetros de agonía,  ya nada parece cobrar sentido,
ni la luz del día, ni la sombría oscuridad.
Carezco de intelecto, pero convulsiono imaginaciones y balbuceo paralelos universos.
Salgo a caminar y ya no son kilómetros de agonía, esta vez se ofrece a llevarme el tren de la apatía.
Estoy de viaje, no sé a donde, pero ya no distingo la realidad de la fantasía.
Me acomodo en el asiento de inválidos, ahí estaba un hombre al que no le paraba de temblar las manos, -mucho gusto- me dijo, soy Francisco Librado, y sufro de Parkinson.
Empezó a contarme sus desgracias de la vida, y que ya no le daba gracia nada, desde la vez que a causa de su vicio por el alcohol, dejó a su hija de mes y medio sola en la casa, con una vela prendida. Cuando regresó, encontró consumida la vela, la casa y a su hija en cenizas.
Me pidió que le haga un favor con el que se sentiría realizado. Consistía en matarlo, -me dijo- toma, esta esta es la dirección de una casa de pajas que construí para mi muerte, encierrame ahí y prende fuego, quiero sentir  lo que sintió mi hija al morir para irme feliz de esta vida.
(En ese momento mi mente palpitó muy rápido, me indague muchas cosas de la vida, recordé que podía hacer esto, pues hace 6 años que mi alma se había quedado en mi cama y nunca más la pude recuperar, salvo los momentos de sueño en los que se manifiesta.) Ya no tenía moral, ni motivos por lo que vivir ni por los que morir.
Así que no dudé más, acepté su propuesta y le repondí: mire señor me hubiese gustado quemarlo en la paja, pero yo soy un infeliz, y si yo no soy feliz usted no tiene derecho de morir sintiéndose realizado, no se olvide que estamos en el tren de la apatía.
Inmediatamente saqué un revolver del bolsillo, le apunté en la sien(1 s), y cuando iba a apretar el gatillo sentí una fuerte opresión en el pecho, frío sudor recorriendo por mis párpados, caí desmayado al suelo, los ojos blancos,  ya no llegada oxígeno a mi cerebro.
................levántate hijo, ocurrió una tragedia en el barrio, se incendió la casa del vecino y su hija de mes y medio murió calcinada, tu padre y los vecinos trataron de apagar el fuego con valdes de agua, pero fue en vano.
https://youtu.be/uR0qDV_K6dA

Comentarios & Opiniones

Leonardo Sarmhi.

Fascinantes letras. Cargada de enigma..Creatividad e imaginación en el contructo de la historia" Salgo a caminar y ya no son kilómetros de agonía, esta vez se ofrece a llevarme el tren de la apatía..". Un placer de lectura..Abrazos fortísimos poeta.!

Critica: 
MTv poeta maldito.

Saludos igualmente gran poeta Leonardo. Gracias por el comentario, la verdad que el final de la historia está basado en hechos reales, ocurrió una tragedia en mi barrio hace años.

Critica: