Avanzar siempre avanzar, prosario emocional

Es preferible morir en el intento, errar en la acción, fallar en el tiro.
No vivir esperando, algo vegetando, feneciendo, en agónico letargo.
Siempre caminar aunque cueste, agobie, gran esfuerzo arduo, diario.
No parar por continuo cansancio vital, por lo que nunca ha de llegar.
Seguir avanzando, haciendo vida, creando futuro en este lento presente.
La vida, sin vivirla, gastarla, usarla, no es vida, solo leve, breve sentir.
Erráticos, ausentes, manejados, sin rumbo, que apagado, duro horizonte.
Y cuando todo se pare, sea por mucho realizado, intentando, muy vivido.
Que el final sea solo una ruta más, que invita a seguir luchando, viviendo.
Nunca avalar frustración, la resignación que pudre el alma, basura vital.
Nada de epitafio adelantado, mensaje breve de lo que no pudo ser y no será.
Mirar adelante, creando ilusión cada amanecer, nuevo tiempo, nueva vida.
Dejar atrás la atalaya y el confort, que desespera en la absurda y vacía espera.
Abandonar la zona de la quietud nacida del dolor de la continua desesperación.
No perder la esperanza, creándola, regándola con la fuerza del triunfo que llega.
Horizonte, nace, crece, se reproduce y luchando vuelve de nuevo cada bello día.
Que no te encuentre el destino viendo la vida pasar, crea vida, da vida, haz vida.
* Poema incluido en "Abracadabra y Libertad" de Manu Cubedo Borsky