Episodio psicoactivo fantasmal

poema de KAMQ

Hierbas de abuela sobre engranajes sucios. Las ollas tapadas prestas a la vid. Ya no tengo que hablarles, no quiero, no puedo. Ellos son solo reflejos, sospecho que son vacíos. Un ilógico círculo vicioso. Son torturas y un abismo, al final de la taza, siempre al final. El olor a menta, me protege, nada conmigo podrá, solos y a desvanecer, siempre solos sin final. Las palabras y los sorbos, las moscas, las durezas y el después.

Ayer entraba impertinente. La angustia en colores vívidos, me dispuse, se dispone. Beber el odio y el olvido, no es tan fácil como amar. Se van a aclarar los fantasmas y el “después” además, unas cuantas tazas más y al fin un final. Se ven distantes otra vez, paredes concretas y un diván. Para Luisa y Valeria, se ama una sola vez, el amor mide un mol, equitativo como ustedes. Tres sorbos, lo sabes, seis fantasmas pitagóricos. Anunciándome…