El viejo

poema de J.C.T.

El Viejo

Acobijado por el cielo y la noche
Se sumerge en su impotencia de viejo.
Esperando la mano que levante
Sus más bellas aspiraciones
Mientras viva.

Sus ojos tristes
No pueden brillar con intensidad
Porque dentro de sí, una alma
Se abate por una gracia
Que no llega.

Solo piensa: soy viejo
He dejado de respirar
Despreciado y abatido
Por los años del camino
Que regale sin recompensa

Mire al cielo
Que es benevolente
Con mi cuerpo
Que aun siente frio
Que anhela tu calor
Tú, cariño.

Pero, aun puede caminar
Por los pasos del destino
Que se resisten a dejar de
Amar,
a pesar que tú, me has olvidado
Dejándome en la acera
De lo desconocido.

Solo una lágrima surge
Solo un suspiro,
Un aliento,
Una voz
Y una sonrisa.
Recuerda que la mía siempre
Estará a la espera
De la tuya
Amado hijo.