Travesías Nocturnas

poema de Juan Diego

Noche oscura, cielo estrellado, viento fresco
En estas condiciones mi pluma baila sobre una hoja
Mi corazón late al ritmo del baile de los árboles de otoño
De color rojo sangre es mi bandera, color de mis venas

Mi ser atrapado en un paraíso
Rodeado con agua de cristal y hierba de oro
Vive feliz, ajeno a tinieblas y dolores externos
Siento un cosquilleo recorrer mi cuerpo de costa a sierra

Mi alma es náufrago de amor
Se ahoga, implora y sobrevive en un mar azul ópalo
Al horizonte veo un rostro hermoso, imposible de alcanzar
Pero mi cuerpo no se cansa de nadar en dirección a esos ojos azules

Las horas pasan, las estrellas viajan, el sol amanece
Mi ser sigue encerrado en su paraíso
Mi alma sigue nadando sin descanso
Puedo morir de dolor en el edén de tu ser, ahogarme en el mar de tus ojos
Pero jamás renunciaré a mi sueño, el querer que tu corazón