Engracia

poema de trujilloch

Engracia

La primera novia nunca se olvida,
por más distancia que exista
y mucho tiempo se lleve mi vida,
aunque mi corazón se resista.
Blanca, dulce y hermosa criatura,
de ojos tapatíos, bellos y alegres;
su cuerpo fuerte, ¡Una hermosura!
Engracia: ¡Que muchos años celebres!
Aquella tarde me diste un anillo,
lo recuerdo como si fuese ayer,
mirando en tus ojos alegre brillo,
que lleno de amor los volví a ver.
Día con día, semana a semana,
mes tras mes, cumplimos un año,
de amor y ternura por la mañana,
para verte después de mi baño.
Besos y abrazos a diario hubo,
mas nunca supimos qué más seguía,
algo aquella tarde nos detuvo,
fue la ignorancia que nos poseía.
Un día me fui de tu lado sin un adiós,
mas siempre te recuerdo con cariño,
verte de nuevo se lo pido a Dios
y aun te lloro como un niño.
Dios es testigo: ¡No quise dejarte!
Era mi padre quien tenía el mando,
me alejé sin dejar de amarte
y por volver, seguiré luchando.

Autor: Humberto Trujillo Contreras
Zapopan, Jal. 29 de febrero de 2015