Entenderte o Adivinarme.

Un intento por entenderte fue lo único que pedí,
No elefantes azules y leones que hablen 36 idiomas;
Solo un Quizás vestido de Domingo,
Un amuleto para las idas y venidas,
Un ancla para nuestra cama con termitas.
Un océano y una fotografía en blanco y negro,
Un grafiti inacabado y tu primera risa de primavera.
No sé si estás de acuerdo con mis cálculos y mis letras diferentes,
Con mis maneras de andar y la lluvia que cae de costado.
No sé,
Si entenderme sea tan difícil que tengas que ponerte a adivinar,
No sé,
Si sea tan difícil invitarme a un café en la mañana
sin despertar las justificaciones;
No sé, -pero pido la oportunidad-
De trepar a la ventana y entrar a hurtadillas,
De pintar tu vida de otro color,
De asesinar el aburrimiento y cantarte al oído.
Un intento por entenderte fue lo único que pedí,
ser el duende escapado de los cuentos de hadas,
El balcón de un teatro abarrotado
Y retorcidos cuerpos desnudos puestos en escena.
No sé, si estás de acuerdo o no
Si dudas o no
Si admites tu fatiga en el alma o no;
Yo simplemente seguiré andando bajo esta lluvia que cae de costado
Sin saber
si prefieres entenderme o adivinarme
mientras tu cuerpo se deja tragar por mi infinito.