El Soplao
El Soplao.
-Fragmento de mi libro autobiográfico
"La otra cara de Jano"-
Tenían en mi pueblo la ancestral costumbre de rebautizar a todo el mundo con sobrenombres o motes. Los apellidos eran algo totalmente secundario; si se referían -o preguntaban por alguien-, primero decían su nombre y a continuación el mote. Así, podríamos hacer mención de personajes tan interesantes como el Hijo del Ama, el Panetes, el Orejón, el Canuto, el Candelillas, el Regalao, o el Medio Higo…, y sobre todo, de un barbero muy muy enteco y flaco, conocido por su complexión como el Soplao: un personaje muy alegre y divertido, poseedor de una inmensa nuez, que al hablar, le corría por el cuello como un gamo..., con los ojos negros y saltones y el pelo crespo y muy ralo, que por su forma de ser, era una de las más auténticas y genuinas atracciones. Le gustaba todo lo relacionado con lo oculto, esotérico y arcano; se jactaba de poder hipnotizar a todo ser viviente, incluyendo a las gallinas, a los burros y a los pavos, destacando, entre sus tendencias más habituales, el incontrolable impulso de contar, mientras te arreglaba, unas historias increíbles que te dejaban boquiabierto, aturdido y turulato. Se confesaba abiertamente comunista, y su afán bolchevique era tan desmesurado, que cada noche, solía escuchar a solas en su cuarto, las últimas noticias de Radio Pirenaica Independiente, en un receptor galena que él mismo se fabricaba con las trastos que encontraba en los estercoleros o en los lugares más extraños...
-¡Pasa Paquito, no te quedes ahí "joé"!..., ¿qué quieres?... ¿Quieres que te corte el pelo?- Me preguntaba sonriendo al verme asomar por la puerta... Y yo, le respondía que sí..., y me sentaba en un viejo sillón de antes de la guerra a esperar a que me atendiera, mientras veía alucinado cómo iba partiendo en pequeños cachos una hoja de papel, para poner los restos del afeitado en ellos..., llenaba de espuma una vacía muy antigua, y afilaba la cuchilla en un raído afilador de cuero, al tiempo que daba vueltas sobre el sillín, haciendo tonterías al pasar por el espejo. Después, sacudía con fuerza un paño blanco -y me lo ceñía tan apretado al cuello- que no podía respirar..., cogía con la mano diestra unas tijeras, y, humillando mi cabeza con la izquierda -hasta hendirme la barbilla en el pecho-, me empezaba a trasquilar, mientras veía caer flotando por el aire, como pavesas negras, mi pelo…, al tiempo que me decía con voz solemne y muy grave: “¡Joé chiquillo, qué pelambrera más "resia" e indomable que tienes!..” Y apostillaba: “¡Con estos remolinos, no te puedo ni peinar!”
Autor:Francisco López Delgado.
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Comentarios & Opiniones
Excelente Franlodel. Siempre es un placer leerte. Saludos. Feliz Año Nuevo.
Gracias Yan. Yo también te deseo un Feliz Año.
Jaja ay maestro que hermosos relatos los suyos, son una delicia de leer! Me ha dado un agradable momento..Dígame sería posible conseguir su libro? Para mi sería mas que un honor obtenerlo! Abrazos y muchas gracias por ser, sólo ser...
María del Rocío, la culpa de no haberlo terminado de escribir, la tienes tú y otros cuantos compañeros..., y este puñetero portal que me ocupa tanto tiempo. Me falta poco y te prometo que en cuanto lo tenga acabado, tú serás de las primeras
en leerlo, porque te pienso regalar uno mi buena amiga. Me encanta que te guste como escribo. Un abrazo.
Jajaj perdón! Pero gracias por querernos como le queremos nosotros!
Obra clara, interesante, con diáfanas descripciones y conserva la tensión discursiva con un arte maduro y atractivo de alto literato. ¡Felicitaciones amplias y aplausos sinceros!. Un gusto sería tener su libro. Tenga paz y salud noble artista.
ameno relato bellas añoranzas felicidades un fraternal abrazo
Gracias amigo Lugomas. Un abrazo.
Bellas letras con mucha Alegría y sinceridad, siempre es un honor para mi compartir tan bella obra, le mando besos y abrazos, le deseo un feliz año cargado de amor, salud y felicidad..
Muchas gracias amiga Viki. Feliz Año.
Siempre es un placer y un privilegio que compartas tus recuerdos. Nos dejas con ganas de saber más.
Y por cierto, qué pasó con tus remolinos?
Deseo que pases unas felices y alegres fiestas. Un fuerte abrazo
Un placer leer tu relato tan entrañable. Un fuerte abrazo y felices fiestas
Muchas gracias Gato. Y también te abrazo y te deseo unas fiestas entrañables.
Ja,ja. Mis remolinos, como otras tantas cosas, se quedaron por el camino. Tenía dos, muy fuertes y recios, y ahora tan sólo me queda una lustrosa calva y unas profundas arrugas como el hito indicador de que en esta vida todo es efímero, y que...
todo se acaba, ¡hasta la hermosura!. Un abrazo y pasa la noche lo mejor que puedas.
Jaja, gracias amigo querido, como me haces reír, como me gustaría decirte cómo va, lo lindo que escribes, como recreas esas vivencias con esa gracia tan andaluza, eres maravilloso, dos bendiga ese talento, un abrazo y feliz año nuevo.
Deja decirte que cuando me asomo a la pantalla y veo algo nuevo tuyo, me incorporo y atenta me lo devoro, porque se que me espera algo bueno, lindo, magistral, gracias de nuevo, cuidate mucho, no todos los días surgen talentos así, un beso
¡Xio, qué grande eres! Me encanta tu forma de ser, tan parecida a la mía. Muchas gracias por tus bellas palabras mi querida amiga.
Pues claro que nos parecemos, porque los dos tenemos las mismas raíces, un abrazo y sigue regalando la belleza de obra
Entrañable relato que como una cálida hoguera ilumina las luces de este nuevo año. Un abrazo.
Se disfruta la lectura y me quedo con ganas de continuar como un gran inicio de un libro de esos que dejan huella...
Reciba un abrazo.
Hermoso y muy grato mi buen Amigo Paco, como siempre le digo su sabiduría nos inspira y da vida a nuestras almas, Dios me lo bendiga y un fuerte Abrazo..
Interesante trabajo.. gracias.
Muchas gracia amiga Gabriela. Cuando termine el libro, te tengo reservado uno para ti. Te agradezco tu generoso comentario. Un abrazo.
Gracias infinitas amigo Orlando. Un abrazo muy fuerte.
Hades, las gracias te las tengo que dar yo a ti.Te agradezco que me hayas dedicado unos minutos. te mando un fuerte abrazo.
Que momentos más alegres he pasado por tus letras, me he quedado con deseos de mas. Me has traído a la mente algunas gentes que conozco con motes muy imaginativos. Un abrazo Paco y feliz día de reyes.
Ja, ja, Luna, También había otros que se apodaban el Canuto, el Candelillas, el Mediarrucha, el Panetes... ¡Me encanta que te haya gustado! Un abrazo amiga.
Si supieras Paco que acá han habido motes un tanto crueles creo yo, como el ollita cagada, María sin tripas, se te cayó el pañuelo, la torera, etc personajes conocidos en las ciudades y forman parte de su historia.