Dame una señal

poema de Felipe

Dame una señal, si es que aún tú mirada mira hacia la mía.
Dame una señal, si es que esa sonrisa ya no es para mí.
Dame una señal, si aquellos días de sol son para nosotros.
Dame una señal, si mi historia de amor ahora es una historia de otro.
Dime, amada mía, ¿acaso tú sabes que pasara mañana?
Avísame por favor, si es que me despiertan tus besos al amanecer.
No tengas miedo, entre nosotros no hay nada que esconder.
Doy un paso hacia tus labios, he retrocedido dos
De repente se cruzan nuestras miradas, la tuya se perdió;
Tomo tu mano, pero se hecha a correr.
Si algo sucede, no lo trates de esconder.
Tus palabras se vuelven frías, como tus manos ahora;
Un hielo se derrite lentamente, como nuestro amor ahora,
Y aunque tu corazón me cierre sus puertas, el mío aun te adora.
Amor, como el de un niño que ha perdido su juguete;
Amor, del que ama la vida y teme porque desconoce la muerte;
Amor, del que ama sin esperar nada a cambio;
Amor puro, verdadero, joven y sabio.
Y Aunque mis nervios se vuelven más fuertes
Y no haces nada más callar
Y ya no me dices que es lo que sientes.
Dime, ¿Qué es lo que sucede?
Ya no quiero ver llorar tus luceros.
Avísame si hay otro que ahora está en tu mente.
No te preocupes, lo entenderé perfectamente,
Pero, si es así por favor márchate,
No quisiera que veas que en mis ojos comience a llover,
No quisiera que tus mares se apiaden por lo que tuvimos
Como lo hicieron hasta ayer.
Ahora solo soy un Yo sin un Tú,
Más bien, ahora eres un Tú con Él.
Solo otra historia más para contarles a los nietos,
Otra historia más que en algún momento volveremos a recordar.
Pasará un buen tiempo para que volvamos aclarar.
Harás con otro lo que has hecho conmigo, y más.
Tristeza como esta, solo sucede una vez.
En un futuro me daré cuenta que he ganado más de lo que acabo de perder.