Pétalo inquebrantable
Lloro de tantos recuerdos contigo,
Amor de mi vida.
Siempre traías paz y amor del más puro,
A este taciturno.
Tu serenidad se introducía en mi, apenas estabas cerca mío,
Y me hacías ver todo plácido,
con tanto cariño que siempre me has brindado.
Rosa mía, y del que te ame,
Nunca dejaría de quererte aunque quisiera,
Eres lo más valioso que tengo,
Y el amor más sincero que llevaré hasta mi epitafio.
Aunque muchas veces siento tanto tu vacío,
Pero me tengo que conformar, con saber que estas bien
Y seguir teniendo entereza, para esperar al señor tiempo,
Y darte el abrazo más sincero que un hombre te podría dar,
El de tu hijo.
Tú si eres el amor de mi vida,
Nadie me tendrá en su vientre, y sabrá que es amarme tanto,
Y nadie tendrá una mamá el cual amar y quitarle el llanto.
Mis ojitos brillosos, siempre fuiste mi apacibilidad,
Y estrujando el corazón en estos versos, te digo:
Cuanto te amo mamá.