Relatos toscos: Cuentos de Gimnasio

-Confieso que no me gusta los espejos, me resulta mas atractivos los portales dimensionales, pero los espejos son desafortunadamente mas abundantes y asequibles, aun no he podido costear mi primer portal dimensional - decía entre risas nerviosas la joven tratando de limpiar la mancha de café en el pecho de su interlocutor, quien la miraba con paciencia, propia de un hombre entrado en años, aquel hombre paliducho abría los ojos y asentía con cada cambio en el tono de voz de la muchacha, ella tartamudeando , le agradecía por aceptar la reposición del café que hace unos minutos había derramado accidentalmente sobre su sweater , el hombre atinó a arquear las cejas rubias, que se camuflaban en su piel ,erguía el cuello levantando el dedo índice, en un gesto de petición de pausa para poder siquiera balbucear una palabra , un intento frustrado por la atribulada joven que limpiaba su frente sudorosa y bajaba nerviosa una camiseta de gimnasio que dejaba expuesta el vientre bajo e insistía en proseguir el relato

-Fíjese señor mío, en este preciso instante cambiaría yo mi vida por un portal dimensional, quisiera desaparecer, francamente, como le digo, odio los espejos, las miradas, las coreografías, los sitios atiborrados de gente y en general, a la gente, pero por favor no me tome a mal, no me ha dado usted aun la oportunidad de odiarle, lo que quiero decir es que la mayoría de las veces, me odio yo, en fin, como en toda regla, hay excepciones, existe un ser humano a quien me es imposible odiar, para empezar, físicamente parece haber sido concebido por dioses, si usted sabe de mitología grecorromana , me responderá "Príapo es hijo de dioses y es una monstruosidad" , pero yo me refería al extremo cuidado con el que ha sido tallado su perfil, con la maestría con la que han tejido su piel ,coloreado sus labios, es una obra de arte el hombre de quien le hablo ,esto sin mencionarle sus atributos intelectuales, mordaz, inteligente, de humor agudo , inalcanzable a fin de cuentas. Después de leer , al menos, cuatro libros de autoayuda, me determiné a conquistarle, como dicen por allí "tenemos que hacer que el universo conspire a nuestro favor" , empecé haciendo cambios radicales en el cabello, la ropa, el calzado , la postura y sobretodo una dieta, todo esto que nos ayuda a ser mas atractivas, ¿Me comprende?- preguntaba la joven mientras enfocaba los ojos azules del hombre que permanecía sentado frente a ella , separados por una mesa de café de aluminio, en él despertaba profunda curiosidad el tono bermellón en las mejillas de la joven que no se disipaba, a su juicio estaban a punto de reventar, al instante pudo responder un breve –OK- mientras inquisidoramente ponía atención a el tono sanguíneo de la cara de la mujer, ella sin detenerse por mas comentarios , prosigue:

- Y finalmente, me he inscrito en el gimnasio, como le he dicho anteriormente odio los espejos, las coreografías, la gente, las miradas y los gimnasios, pero sobretodo la ropa de gimnasio, aunque trato de ser tan positiva como los libros de autoayuda recomendaban, se que las mujeres de tallas grandes , como yo, usan modelos de ropa deportiva desgarbada, pasada de moda o muy rocambolesca, esperaba lo mejor, pero he terminado escogiendo este pantalón deportivo verde, con el que parezco un brócoli , con este conjunto ceñidísimo, me convierto en una oruga sobrecrecida , sin embargo, imaginando que con la pérdida de un trocito de dignidad ganaba una figura despampanante , me dije a mi misma, al mejor estilo de Maquiavelo, "el fin justifica los medios", eso sin contar esto de unirme a los aeróbicos, en serio, resulta humillante, me veo gigante y mis intentos de baile son más parecidos al de una mascota de un equipo de baseball profesional, en fin, no escatime en recursos , he pagado este gimnasio suntuoso, anexo a este respetable hotel de lujo, no obstante mi entusiasmo ha durado hasta hoy, pero no han sido los espejos, ni las coreografías, tampoco la ropa de gimnasio y los aeróbicos, mi Adonis, ha visitado hoy el Gimnasio, una amiga en común nos ha presentado, recordándole, que de cinco asignaturas que cursamos en la universidad, coincidimos en cuatro, él no sólo alegó que no me recordaba en absoluto, sino, que imprimiendo ese humor que admiro, esa sonrisa que adoro, sólo ha alcanzado a decir: "lo único que puedo recordar con todo ese verde, es que debo servirme ensalada Cesar para cenar", no se si él es cruel o yo hipersensible, pero he huido a toda velocidad de esa sala de torturas, sintiendo perdido todo cuanto invertí, membrecía, tiempo, energía y dinero en inútiles libros de autoayuda y le he atropellado a usted sin intención , derramando todo el café en su sweater, lo he traído a rastras a este café y he monopolizado su tiempo con mi historia poco más que patética, que usted amablemente no ha interrumpido, me disculpo, es su turno, he hablado muchísimo- El hombre baja la cabeza , entre cierra los ojos mirándola fijo, se encoje de hombros en una escena de visible confusión y le contesta:

-Yo no hablar nada español

Comentarios & Opiniones

Delia Del Tejar

Joelfortunato, agradezco ese valioso tiempo que ha invertido en leerme y dejarme sus comentarios positivos e inspiradores, muchas gracias

Critica: 
Osler Detourniel

Seductoras letras que atrapan facilmente al lector, muy buena obra, felicitaciones. Saludos cordiales

Critica: 
Delia Del Tejar

Osler Detourniel, me alegra que le haya gustado el relato!, son mis pininos tratando de narrar, muchas gracias por leerme!

Critica: