Mis lágrimas

Mil enigmas e incógnitas tiene mi cabeza en este instante,
dudas a más no poder,
tal vez tenías un amante,
por eso ni una sola respuesta tengo para dejarme de doler.

Lloro y lloro sin cesar,
desde que te vi comenzaste a ser mi penar
y gastando la vida en llorar voy a terminar.

Son lágrimas de angustia,
pues sé que tu elección no fue la correcta,
preferiste la alta sociedad
para que tu vida pareciera perfecta
aunque después todo lo contrario te parezca.

Cada una de estas lágrimas vas a pagar
pues despreciaste al ser que más que nadie te podía amar,
te dolerá haberlo perdido
tan sólo por una mala elección,
que tu corazón sabe que no fue la correcta
y para ese entonces estará dolido.

Despreciaste de mi vida los momentos de lucidez que tenía,
los pude haber empleado en algo mejor,
ya que siempre he tenido mala suerte
y hasta ahora por fin algo bueno me salió,
esos momentos se convirtieron en lágrimas
y no sé cómo dejar de llorarlas,
lágrimas que destrozan a todas las almas.

Y si me dieron a elegir entre tú y mi mala suerte,
preferiría a mi mala suerte porque ella nunca me abandonó,
me hizo fuerte y no me defraudó.

Sé que mañana vendrás a buscarme,
a tratar otra vez de cautivarme
diciéndome que mi amor es todo
y lo único que has pedido,
pero si no lo haces sabré que una vez más tu propio orgullo
te habrá vencido
y cada una de mis lágrimas lloradas
ahora tú las derramarás.