Guerreros

Vi arder el cielo,
vi congelar al infierno,
sé que no soy un dios,
pero todo es un recuerdo.

En cenizas el ejército,
con la lava en un creo,
arrodillados al evento,
asfixiados en anhelos.

Desde las llagas del interior,
atrapados sin perdón,
entre los brazos sucumbieron,
abandonados al momento.

Muerte y gloria gritaban,
más no hay gloria,
y su muerte marcaba,
la sonrisa torcida de un ángel al ver.