Cicatrices del Primer Amor
Jugamos con fuego, sin saber que nos quemaríamos, entregando nuestros corazónes como ofrendas al destino. Tú fuiste mi primer verso, mi melodía más dulce, pero también la tormenta que arrasó mis sueños.
Juramentos susurrados al viento, promesas rotas, y en el abismo de la memoria, enterré tus risas y tus lágrimas. ¿Por qué, amor fugaz, me dejaste con el alma en ruinas, buscando respuestas en las sombras de lo que fuimos?
No me pidas que te busque, pues ya no estaré allí, mis pasos se alejan, como hojas llevadas por el viento. Fuiste mi peor y primer amor, un tatuaje en la piel, una herida que sanará, pero dejará su marca.
Quizás algún día, bajo otro cielo, en otro lugar, encontraré la cura para este corazón maltrecho. Hasta entonces, sequiré caminando, buscando respuesta, mientras la tormenta que es tu amor se desvanece en el horizonte.