DANDO AL SILENCIO LA ESPALDA
Cuando la inspiración, carente del poder de crear soñando, estaba a punto de alzar su vuelo, hacia el destino de las sombras silenciosas, algo se encendió en sus ojos, moviendo su corazón de nuevo, al ritmo de las ilusiones, los anhelos, las esperanzas...
Es entonces cuando la sangre, bombea de nuevo a través de ella, lanzando retahílas de sílabas compuestas, en búsqueda de nuevos retos, ilusiones, promesas, y sensaciones, que dejarán sobre el lienzo que espera, retratos de nuevos versos, estrofas, quimeras, dando al silencio la espalda
Y si el irrealismo-real, quiere vestir sus alas, racionalizara su postura, de poeta a escultora, para tallar con palabras las piedras de la belleza, siempre con vestiduras de la locura del amor y la imaginación, la fe en lo que persigues y la esperanza como don.
Y todo a su debido tiempo. Despertando ya de su sueño, para volar sobre el lienzo, deslizándose sobre él, dando luz a el cumplimiento de sus deseos. Que aunque dormida, aunque callada, nunca olvidó lo que anhelaba, ni perdió la perspectiva de lo que esperabas, siempre con las
vestiduras de la locura del amor, la imaginación, la fe en lo que persigues, y la esperanza como don.
Annia Mancheño ✍
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