Cómo entregar mi alma
Mis manos pueden estar frías.
Pero no lo está mi alma.
No lo está mi corazón.
Ni mucho menos mis movimientos.
Ellos son cálidos al pasar.
Son complejos en mi mente. No sé cómo lo serán a tus ojos.
Mi respiración es fuerte.
Podés sentirla. Yo también puedo. Todos pueden.
Es un huracán de sensaciones acumuladas haciéndose libres en no más de cinco segundos.
Mi tacto es fuego. Y no deja cenizas a su paso. Sino que deja más fuego ardiendo detrás.
Hay mucho más.
Mi boca puede hablar idiomas solo conocidos por el hervir de nuestra sangre. Y puede enmudecer a la tuya con un par de sílabas.
Mis abrazos son representantes de mis ilusiones y deseos. De mi futuro y mi pasado. Y a su vez, para vos, son todo un presente.
Un beso mío. Una caricia. Algo fortuito. Algo que me fue difícil en algún momento, y hoy surge con tanta fluidez.
Todo eso es entregar mi alma. Aunque puedo entregarla de otra manera. Una mucho más simple: con tan solo una mirada.
Amp
Comentarios & Opiniones
La mirada, es un acto tan poético
Gracias por compartir poeta!
Saludos
son lindos sus poemas, bienvenida o bienvenido, saludos cordiales.
bella entrega nos compartes. muchas gracias.
Me lo quedo es precioso!
Saludo nuevo. Extraordinaria oferta poética. No esperaba tanto, muy grande la entrega. Mejor le doy un cálido abrazo y mantenga su alma para seguir escribiendo. Gracias. Que siga su buena pluma, hasta nuevo poema.
Muchísimas gracias a todos, muy agradecida de sus cálidos comentarios, me alientan muchísimo y son muy agradables de leer siempre. ¡Abrazos fuertes!