Montañas y riberas...

Montañas y riberas…

Montañas y riberas de tu cuerpo,
todo el cielo en tus ojos, toda rosa
todo albor, la pradera deleitosa,
rosas labios, de amor, toda mi rosa!
Oscuras, si en estrellas, son las noches,
tu cabello, en el harpa meridiana,
todo albor, si en mañanas, róseos plectros
tu blancura, en la nieve, Sol y oro…

Montañas y riberas te rodean,
son flores, colorido a tu blasón
y te puebla, opalino el estandarte
en el Arte, mi lecho, tu prisión…
Cobra el Oro y la Plata, y tus rubíes,
sueños que bermejan toda intuición,
laberintos que dan siempre a tu boca
epopeyas, al rostro de mi amor…

Son dulzuras prohibidas de tus mieles
que provocan narcisos y Topacios,
de tu Arte, la Música es mi hechizo,
joven, ciernes finura en explosión…
Con tus piernas erizas la marea
que el silencio, en la boca de tu amor:
todo arte perdura si no acaba,
la memoria en tus pechos, dice adiós…

Todo el lecho es tu Valle de manzanas,
toda risa de júbilo soy yo,
y en tu boca se enciende mi deseo
palabras que son Fuego entre los dos…
Dos almas y dos cuerpos enfrentados
consumen al desierto, de la Flor,
y en tu Rosa lasciva mente ocupas,
distinguiendo en el cuello de tu ardor…

Palabra enarbolada con un labio
en labios que, si rojos, besan dos,
dos besos en la corte de tus labios,
son rosas y jazmines de mi amor…
Dos labios, que sulfuran el aliento,
entre la copla herida de mil flores,
y en Arte de tu risa son dolores,
que cuerpos de tu rosa son portento…

Gloria bella es morir en tu arbolada,
exhausto en mi prisión, mi Enamorada!