La peste equina
Una mañana…
las autopistas estaban llenas de centauros
los automóviles detenían sus motores enfurecidos
resonaban insultos, blasfemias,
relinchaban aquellos extraños seres
como lobos hambrientos
serpientes sediciosas
hienas pendencieras
el asfalto hervía como el odio
casi podríase haber mordido
en el vasto aire plagado de insurgencia.
Legañosas, vertidas en su centrípeta lujuria
salían eclécticas las korai
todas tullidas de una pierna
incapaces de huir
con las espina dorsal rígida
con el maquillaje fresco, cavernoso, cadavérico
los tacones amarrados con cadenas
cuyo metal de cuántica virginidad
transmitía alergia tornasolada, efervescente
como un molino de viento movido por pedos vaginales
bajo canículas de despecho
regidas por 6 pulgadas de amores y odios
caracoleados en dedos sedimentados
entre el vacío invisible y erótico por el cual las ondas de internet
penetran nuestros deseos;
de anteojos desojados
mensajes misóginos tatuajes de magnums humeantes, recalcitrantes
de notas bajas en química
de no saber montar en monociclo
vampiristas
draconianas
malversadoras de los fondos públicos
de la sensualidad.
El sonido de tacones y pezuñas emponzoña oídos aullados y ahítos
los centauros portan bastones macizos
golpéan
extremidades, caderas, espinazos, cráneos;
pisotean
órganos, rostros, carne, esperanzas, ideales
demencias
amores menores y mayores, miradas, olores, lenguas, intestinos
…ipso facto despliegan la túnica que agasaja sus noblezas anteriores y como el guerrero cuando empuña su espada
en el campo de batalla
pulverizan aquella paz anacrónica
¡se la contempla emerger
desde los pozos más fétidos de sus femeninas almas!
…la hediondez pudre los colores.
Algunos, cansados de fornicar
mastican
glúteos, bíceps, cerebros, corazones.
Extasiados otros,
en plena eyaculación golpean con fiereza a sus víctimas
y atroz, la sangre,
empapa el rostro de algún allegado
con el cual se enzarzan en mortales disputas.
¿Quién podría saber de cuántos estoy hablando?
Su ferocidad y salvajismo
es tal que no parece haber modo de contarlos en número.
Su galope es rítmico y sano.
Sacuden la autopista,
cabalgan
por encima de automóviles
hacen saltar lujosas siempre las alarmas. Allá se ve a un hombre ahogado por la locura
acá una pareja muere sepultada en su propio vehículo
algunos niños son arrastrados varios kilómetros
lanzados como un balón de rugby
desarticulados
vacías las cuencas de sus ojos
con el cuello roto
dementes en apenas unos segundos
en apenas un golpe
una risotada
un mal aliento
una coz mantequillosa.
¿Es una tormenta?
alcanzando el sueño de la inocencia cuando despierta dormitando en sus marmitas
vomitando en sus vitrinas
inanimando lo inanimado y frío
…es la escarcha oscura o el terror de despertar:
QUIENES
insomnes y dementes por presencias invisibles
y etéreas mastican el agua antes de tragarla
QUIENES telescópicamente doblan sus billetes antes de introducirlos en sus carteras y encienden velas a extraños ídolos de polietileno
QUIENES
Cepillan sus dientes intentando borrar
las manchas de su alma
entre el aroma misterioso y aletargante del tabaco
QUIENES
descubren la soledad en sus sábanas
QUIENES salen a la calle con el estómago vacío
y su cuerpo parece no haber sido jamás su cuerpo
QUIENES
discuten con sus parejas
recién casados e ignorantes
por extraños sueños, cabezazos, convulsiones
QUIENES
aman de verdad y mueren gaseados
¿ QUIENES QUIENES QUIENES?
QUIENES
computan su impotencia
QUIENES
pentagonizan su billete de metro a ojos
de vagatas sobrios peinándose el bigote
QUIENES
envenenan a perros y gatos en la esquina más intransitada de su oscura y aturbantada callejuela
QUIENES perniciosamente envenenan a sus hijos
por dos euros con el desayuno
QUIENES
mueren consumidos en su lecho, inactivos
inductivos
tragados por ellos mismos miedosos del miedo por el miedo han de temer y temen QUIENES
forjaron pandémicamente esta ciudad
una ciudad cualquiera
y vierten bermejas pinceladas impresionistas en su propio numen
siendo un retrato del siglo pasado
lo primero en arder
cuando el fuego se hace querer.
ACALLADOS
dos playboys de media mañana
como marionetas de fieltro
en las manos marchitas
de una ojerosa camarera treintañera
sin propinas ni vacaciones
ACALLADOS
los obreros quienes educan a sus hijos con vistas a destruir sus propios parques, casas, colegios
para en un futuro tener trabajo
seguir sus pasos
hacer germinar su flor donde su semilla
sea como fuere se plantó ACALLADOS
los teosofistas en su incubación ultraterrena
-por querer la piel morena en pleno invierno-
ACALLADOS
sobre todo los muertos
insignia de que este mundo jamás enloqueció lo suficiente
ACALLADOS
los profesores de matemática musical
¡Un nuevo ritmo desgarra espiralmente los átomos del aire!
desde un oscuro milímetro de mlmtr de mm
-por insensorial mi pluma-
es vomitada la equina miríada inagotable
la gota china
un mar de polvo radioactivo, silencioso
la octaba más frágil de la doncella de hierro
el verso pagano más ebrio
más embravecido
más deseante
más casto, bello, parnasiano, parecido al grito lejano del dolor humano
…piruetea moza la ciudad
las sonrisas se alargan
más simpáticas, dementes
las vaginas se agrandas
más morbosas, dementes
los ojos caen
conscientes de su soledad de suelo polvoriento y patibulario
las cruces caen
Jesús corre como un gato asustado
a lamer sus manchas, a fumar sopa
¡Son los íncubos!
¡Cólera!
¡Rabia! atardecer denso
miasma genital a borbotones
se saludan entre sí con manos ajenas
disfrazados de pieles que aún respiran
embrutecidos, hay quienes intentan hacerles frente,
hay quienes despavoridos agarran su cuchillo aún con mermelada
¡Aún creen en invasiones alienígenas!
En artificios orientales de hologramas panorámicos, holocáusticos, cavernícolas, embebidos
¡SOLOS EN LA OSCURIDAD!
Suena algo como
"Something In The Way She Moves
Attracts Me Like No Other Lover..."
y un lampiño centauro extrae con sus propios dedos
los dientes de una colegiala semidesnuda, sanguinolenta, impávida
UNO a UNO
separados
los guarda en su limosnera
suelta una carcajada y se marcha embravecido
hay dos cuadrúpedos gigantes desmembrando a un policía
un figurante vestido de murciélago, otro de araña
pretenden intimidar la brutalidad medieval del acero
la velocidad de una sombra ensangrentada
la tenacidad muscular de un caballo
pisoteando
algodón barato
drogas refinadas
comida recalentada
café rancio.
Es una primavera otoñal
tempestuoso embate irisado ceguera sustancial, pragmática,
un madero-un golpe
un pincho-un pinchazo
flagrante
conspicuo
el triunfo del asteroide
la vida libeluleando entre lloviznas sangrientas, apacibles
sobre un centauro recostado exhausto
espantando moscas con su cola
muy suyo
muy suyo
... tronea, y no por los apaches
aviones supersónicos
tanques, torpedos, no
…porque todo explota, todo lo que puede explotar explota
explota sin más.
no son lamias
son láminas de mujer amilanada, desvencijada sin alterar su belleza
la luna explotando en mil pedazos
pero imperturbable su espíritu esférico brillando en el firmamento, hermosamente,
sin nadie capaz de saborear tal desdicha
sin nadie capaz de aceptar
¡Los cuervos!
¡Las prímulas del odio y la desesperación!
alas negras vociferantes
hipnotizadas por lo gemebundo, lo chorreante, lo iracundo
como un presagio de abandono fulminante
caen del cielo gris
se posan en cualquier ángulo de cristales rotos
no temen la humedad que transpira en la ciudad
picotean entrañas, tuétanos, córneas
un centauro con una gran trenza tensa su arco
sus brazos como rocas milenarias
descargan su furia en la pierna de un corredor sigiloso
a través de un oscuro ventanal
su flecha se transforma en alaridos
en la rueda de un deportivo azulado
que impacta en una biblioteca ardiendo, abriendo un boquete por el cual
una masa deforme de carne humana
huye hacia una lluvia de flechas rapaces
¡SOLOS EN LA OSCURIDAD!
Pero ¡AY! del esqueleto labrador
esqueleto labrador
esqueleto labrador
…Desde lo más profundo del océano emergió
solo, temeroso de sí mismo
¡El esqueleto labrador!
Cuando enterró al último inocente
desapareció todo ese mal
con la velocidad de un rayo
y fuentes de inagotable riqueza y sabiduría surgieron
negras como aquel instante
de todas aquellas tumbas
¡El esqueleto labrador!
En silencio
…Sin testigos
trazando muerte con su pala
ocultando el mal que sus ojos contienen.
En silencio
En silencio
En silencio
Comentarios & Opiniones
Saludos ALASTOR : Ya le había comentado y felicitado por su amplia y agradable obra, con elementos estéticos mixtos, modernistas y contemporáneos. Una bella obra. NO SE PORQUE BORRARON EL COMENTARIO EMITIDO. Reciba mi respeto y amistad.
Felicitaciones por tan gran obra, grata lectura. Saludos y se feliz.
Joel, gracias por su nueva visita-en este caso dos- y por el seguimiento a toda mi obra, es un honor. Tal vez se deba a las complicaciones por las que pasa la página a veces el motivo de su comentario perdido. Le envío mis mejores deseos y amistad.
Saludos Acnamalas, poetisa, es un placer que se pase por mi obra, gracias por su acercamiento a mi poesía. Que sea usted también feliz.