EL HUMANO Y EL DINERO
poema de IARA MARÍA VILLEGAS
Porque no es miserable el avaro,
es miserable
el que no reconoce sus propias miserias,
pero sí las ajenas.
El que a la noche,
en silencio,
no se dice para sí,
lo que causó.
Inevitablemente las personas cambian,
pero el dinero puede hacer
que dos personas ahora sean desconocidas.
El olvido a veces causa eso,
el dinero hace que la persona
pierda la humanidad
y se convierta sólo en un cuerpo.
A veces te preguntas si siente,
si me lo preguntas a mi,
yo creo que sí,
muy en el fondo aún debe quedar
algo de lo que alguna vez fue,
pero no seré yo quien lo descubra.
IARA MARÍA VILLEGAS.