Cuando esté cayendo.

Emborrachao`, casi sin saber donde ir,
con las manos demasiado frescas,
es en que el barro de las borracherras,
me voy chapoteando, invocando al olvido,
alguno que se lleve hacia las sombras,
tu recuerdo de chanel,
tus besos, ´´remedio para bobos´´.

Acostumbrado a no tener pincel,
para pintarme un sueño sin hiel
¡el dios de un Cristo,
sabe muy bien por que me trajo aquí!

¡entre tantas liras,
entre mucha música,
la linda poesía,
la maldita angustia, patrona de
cientos de mis días,
la asfixiante agonía por no verte,
(de no mojarte los pies).
En este maltrecho pequeño mundo, al que llamo mio,
siempre encuentro entre la oscuridad y el alba,
una simple salvación,
el peculiar habito de leer,
Cuentos de Gabriel García Márquez, un ensayo de Symns,
un poema de Borges,
una canción de Álvarez,
Párrafos de Nietzsche, pequeñas dosis
del ``pajarraco`` creado por Pepo.
Todo esto, solo para
sentirme bien cuando esté cayendo.