MIRANDO A DESTIEMPO

poema de Valeria Ruiz

Qué harías tú, si me olvidas por la travesía,
si mi gesto se va con el viento del mismo modo en que lo hace un suspiro;
qué harías tú, si abandono la esencia que todos aspiran permanezca y en su lugar, con las reliquias del suelo fabrico un castillo rebozado de escombros, un castillo fabricado especialmente para ti y para mí.
Ahí nadie nos hallará, nadie podrá vernos,
tu sonrisa y la mía se aunarán; haciéndose cada día más fuerte,
aguardando que aquel palacio, cimentado con los lamentos tirados por el mundo, entregue los frutos que, aunque anhelo florezcan, no lo harán.

Sería un secreto, mi secreto y únicamente lo revelaría contigo, porque,
tú te deleitas con mis sueños y para suerte, yo soy uno más de ellos.
Un sueño que permanecerá allí cuando tú quieras que esté.
Solo debes cegarte y yo me mostraré, dispuesta a construir con teselas rotas una cometa que te exponga el cielo;
tu cabalgaras en ella y sentirás como las lágrimas cubiertas por las nubes que por poco palpan lo oculto, rozan tu rostro y así humedecen tus labios con diminutos quejidos de suplicio y agrado.
Yo, sin embargo, aguardaré con anhelo en una roca de papel tu retorno, esperaré que vuelvas y me solicites algo más;
y al hacerlo, me levantaré y correré a aquel castillo desidioso por los recuerdos que nadie ambiciona y agarraré sus frutos de omisión para recrear tu apetencia.
Después despertaras, y yo, esperaré anhelante tu venida,
el regreso a ese mundo de cuentos que solo tu deseaste.
Aquí estaré, contemplando en el silencio,
viendo como creces y todo se olvida; viendo cómo me olvidas.

Comentarios & Opiniones

Centinela Azul

Hermosas líneas... Me ha gustado leerlas.

Critica: