Te pefiero
poema de Eusebio García-Gasco

Todas las respuestas del tiempo
están ovilladas en los regazos
del intermedio de los versos,
como las líneas de las manos.
Aún te prefiero a mi soledad.
Nada daña a un corazón puro,
ni las espadas de los puños
ni duras espinas al abrazar.
Azucemos los volcanes de fuego
calentemos el ara de la entrega
que derrita los pulsos de hielo.
Que seguro que nos puede gustar.



