Ya fue, ya fuimos

Aquí estoy una vez más, dedicando palabras que nunca serán dichas, expresando sentimientos que nunca serán descubiertos.
¿Karma? No lo creo, yo pagué mi deuda, mi alma está tranquila... Sin embargo la tuya sigue con sed de venganza.
¿Rencor? Yo no siento el más mínimo odio hacia tu persona, no podría hacerlo, me hiciste feliz. ¿Decepción? Sí, creo que esa es la palabra que lo define. Yo pensé en ti en cada oportunidad que había para perjudicarte, yo pensaba en aquel momento en el que nuestras miradas se cruzaban y el tiempo detenía su marcha; jamás pensé en tu apuñalada de indiferencia y frialdad. Pero aún así, aquí estoy una vez más, mirando al cielo con una tormenta en mi interior, con una nevada en mi corazón y con una almohada que escucha los gritos silenciosos dedicados a mí, esos que dicen "Déjalo, ya fue, ya fueron y nunca más debe de hacerte daño". ¿Es que acaso quieres ver cuanto lograré soportar? Si es así lamento romper tus esperanzas, porque no dejaré que veas el maldito desastre que haz dejado en mi mente. Voy a sonreírte con ese gesto cínico y prepotente que tanto odias y voy a reír a carcajadas enfrente tuyo, ¿y sabes porqué? Porque tú no mereces que deje de hacer cualquiera de esas cosas; tal vez en algún momento lo valías, pero ahora, lo único que puedo sentir por ti es lástima.

Comentarios & Opiniones

María del Rocío

Muy hermoso! Excelente escritura captura a su lector. Saludos y adelante!

Critica: