Manifiesto de un alma libre

poema de Sin Rostro

Hubo un tiempo en que un impostor se disfrazaba de mí.
Era este un cobarde que vivía en el encierro.
Tenía por cueva el cajón donde suele guardarse la ropa.
A diario se vestía de miedo.
Al verse al espejo, no se reconocía.
El rechazo era su más grande pavor.
Actuaba, cual digno impostor.
Pero un día, lo estrangulé.
Le arrebaté el aliento.
Le di vida a mi verdadero yo.
Dejé salir las flores,
las luces y el brillo
que se encontraba oculto por el temor.
Incendié mi propio mundo
para quemar el dolor,
para sanar las heridas
y revelar la verdad durante tanto tiempo negada.
Llegó el momento de abrir mis alas,
de volar brillando...
de amar sin miedo.
Entonces mi alma tomó su propio fuego.
Ardí.
Juré al viento nunca más negar quién era,
ni permitir que las máscaras y disfraces de impostores
volvieran a vestir mi piel.
Ni los sermones de la iglesia,
ni las opiniones ajenas.
Era yo.
Y finalmente, alcé vuelo en libertad.

Comentarios & Opiniones

Jesús Ángel

Bien hecho!!,
aquí mis aplausos.
Otro renacido más,
en su propia fase de transformación y avance.

Critica: 
Xio

Auténtico, libre... Buena obra abrazos cordiales, Feliz día.

Critica: