El Estanque.

poema de Lepre.

Había un solo nenúfar en mi estanque. Hace tiempo cayó la primavera, y de la abundante vegetación de sus alrededores comenzaron a caer pétalos. El agua comenzó a albergar pequeñas hojas, miles de ellas, tan coloridas que aún parecían estar vivas. Flotaban plácidas rodeando al nenúfar, proporcionándole una cálida compañía con sus tonos primaverales. Los delicados y verdes juncos decoraban la superficie y se mecían con sutileza, produciendo el murmullo de las hojas rozándose. Pronto crecieron más nenúfares, igual de únicos que el primero. Eran pocos, pero no hacía falta más para mejorar la armonía visual de aquel hermoso estanque. Aquel paisaje era digno de observar con calma y detenimiento, digno de ser descrito en una canción.

Por alguna razón alguien comenzó a sentarse al borde. Venía a menudo. Solo divagaba un rato, fumaba y a veces lloraba. Arrojaba sus cenizas y sus colillas al agua y todo se fue llenando de restos de noches en vela. Las hojas fueron sustituidas por la mugre, los nenufares murieron ahogados en la contaminación del agua, los juncos no volvieron a bailar. ¿Quién fue aquel que vino a perturbar el espacio con su desdén?, ¿Quién destruyó aquel lugar al que amaba ir a soñar cuando no podía cerrar los ojos?.

Comentarios & Opiniones

Luz

Lepre bonito relato,,,Quién será aquel que hizo tanto daño. Me quedo pensando . Un abrazo.

Critica: 

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