UN SUSPIRO

UN SUSPIRO

Un suspiro eleva el alma, se difuminan pensamientos
Dibujados en el alba pasando muchas veces inadvertidos,
Porque estamos a distancias muy lejanas con pasajes no
Escritos ni vistas en el alma, con despliegues coloridos
Dispersos en la distancia.

Un momento indescriptible, un suspiro y otro mas hace
Cada vez, mas lejanos de nosotros mismos, no estamos, no
Reaccionamos al inconsciente consciente de lo que esta
Pasando por nuestra mente, pero no nos damos cuenta
Porque muchas veces, realmente estamos ausentes.

Su cause es el mismo pero su esencia hace siempre la
Diferencia, entra con un montón de información a veces
Selectiva otras muchas veces confusa pero siempre nos da
Una escala ilimitada de transición en espera de algo mejor.

Y cada vez entran nuevos suspiros que dan empuje a mis
Pulmones llenando espacios cruciales en mi existencia, a veces
Golpean fuerte otras sacuden el alma, pero siempre transforman
Cambian, hacen ver la vida liviana y nos llevan a momentos
Grandiosos.

Llenando cada espacio de mi estancia y haciendo posible lo
Imposible, nacen nuevos cambios nuevas y claras ideas, de lo
Que pasa a mi alrededor y sin darme cuenta abren caminos
Insospechados de alcances infinitos que solo los atrapa mi
Consciencia presente en cada acción.

Ven suspiros de nuevo llenen mi alma de un nuevo amanecer, de
Un atardecer pleno inmenso absorvente que penetre que encaje que
No se escape ni una gota de esplendor, que arranque nuevos suspiros
Y que haga de mi un suspiro hasta que rompa de nuevo con una
Nueva ola mejor.

Que bien se siente cuando uno es capaz de arrancarle al mundo una
Sonrisa, cuando uno es capaz de seguir con su vida a pesar de tantas
Cosas que creemos no superar, pero que poco a poco y con entereza
Logramos dar a los demás lo mejor de nosotros mismos, sin tener
En cuenta ni la edad ni el tiempo, solo darnos para vivir mejor.

Suspiros lleguen de nuevo para arrancarle un pensamiento
Mejor cada día a nuestra vida.

RUBIELA MARTINEZ LOPEZ
16 de enero de |920

Comentarios & Opiniones

Rubiela Martinez Lopez

Es darse cuenta de esos momentos que nos hacen meditar.

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