sepultura

SEPULTURA
No tengo alas para volar, no tengo pulmones para respirar
no sé cómo hago para vivir; si en cada latido que doy, siento estar
más viejo arrugado. Acompañado del viento y la nube del panteón y el ataúd, intentando escribir que ni siquiera sé qué decir.

Me dicen que se hizo más bella, y que mi amigo Daniel Acevedo logró ganar esa batalla. Qué hago endulzando mi vida con triunfos ajenos, si estoy viejo y arrugado durmiendo en vetustos pellejos como aquellos que dan su último paso a la tumba o que se ahogan con el olor y el sabor de la espuma.

Adiós Marinhero adiós, donde quiera que vayas ahí que se apague tu voz. Que sea un coyote o lagarto la que se trague tus entrañas, así dejarás de leer en las mañanas o escribir en la noche oscura cuando sale la luna para alumbrar su terraza a la divina doncella.

Pasaron veinte años de juventud, y no hice amigos como la multitud
Me quedé encerrado en esta caverna repasando a Gandhi y a Baruch Spinoza, de qué sirvió estudiar filosofía y política; si todo lo que me rodea es problema y más problema, hasta la mujer de mis sueños se fue a brazos ajenos.

El libro que compré de joven, se cubrió de polvo brillante y las páginas más lindas de mi ejemplar, se hizo hogar de arañas y ratas, y qué hice por ellos, nada… Murieron mis sueños de poeta, surgieron mis venas de viejo, probablemente el óbito venga por mí.

Si ven a mi madre, no digan que estoy viejo y arrugado, es capaz de surcar las montañas y cambiar su vida por la mía. No! no quiero que nadie arriesgue su vida por mí, si algún día logre salir de esto, será porque pude contra la muerte o porque los puñales que me plantaron, no lograron despedazar mi cuerpo viejo y arrugado.

Pasó mi juventud como el viento en agosto, encerrado en esta patraña, intenté amar en silencio y no conseguí esa luz de esperanza. Son tres y diez de la mañana, se acerca la hora de mi partida, los mares se cubren de nubes oscuras, la pluma me arroja lágrimas de fuego bañado en magnesio y azufre, los ojos me empiezan a pestañear y mi voz se apaga para decirte.
Adiós…
ROMANÍ MARINHERO
Lauricocha Huánuco Perú.