Te esfumas

poema de Ker

Tus brazos me sostenian con un tacto firme,
donde esa noche era tan tuya como tú mío,
tu esencia en mi piel,
como las rosas al viento estremecen.
Si ese deseo carnal es inevitable entre nosotros
Anda pues, que no te detendré.
En la penumbra admiré tú furor,
con ganas de no terminar.
Eras mi escape y apesar de eso el sentimiento de pertenencia jamás se fué.
El tiempo corrió lento mientras me llenaba tú cuerpo.
Encajas perfecto en mi piel -dijó él; me hiciste tan feliz.
Nuestros cuerpos danzaron a la luna llena,
Sin saber en qué otra luna te volvería a encontrar.