Libres de destino

poema de Lucas

La suerte ha muerto y con ella la vida,
Aprendemos a morir lanzando dados al aire
Todo lo que queda es el azar y la nada:
Un paso en falso sobre el destino nos lleva a caer,
Un paso firme sobre el tiempo nos enseña a crear.
Lo único que se necesita para jugar es creer
Y para creer uno se debe arriesgar.

Las aves no aprenden a volar de la nada,
Las aves vuelan arriesgando la vida:
Se lanzan al vacío, pozo sin fondo de tierra,
Donde abren sus alas dejando de ser polvo
Para convertirse en niebla, oscura y sin retorno,
Que flota sobre la nada, sosteniéndose por sí sola
Con las alas crecientes de la esperanza
Para sobrevivir salvajes y libres, solas,
Extremadamente solas, vuelan, surcando los cielos,
Rompiendo el aire con sus filosas alas,
Fuertes, increíblemente fuertes, realmente vivas.

Las aves y los peces, hermanos que fluyen;
Mártires atados a los vientos, al cielo tempestuoso,
A los ríos irreversibles, tormentas huracanadas y a los mares,
Que se revolucionan desatando un infierno
Sobre la existencia, convirtiéndose en grandes animales,
Monstruos de la vida, seres perversos, indestructibles, liberados
De sí mismos, una y otra vez, para siempre.

Soy un animal con alas y agallas, con patas y cuernos;
Soy un animal indestructible cuya debilidad sólo la conoce
El tiempo.

Tengo agallas para respirar la lluvia, para caer
Al agua, para sentir la vida; y tengo alas.
Alas realmente hermosas, grandes, inmensas;
Son alas que me permiten trascender
En el tiempo, descubrir la gracia desde los más
Alto y percibir la vida con el viento, con el aire
Desde las nubes grises y el Sol radiante, junto con la Luna
Y las estrellas. ¡El universo es impresionante!,
Sólo cuando se usa la mente para volar en la libertad
Que lo precede.

Si es menester, me crecerán cuernos como toro,
O como un cabrito cuernitorcido; o me saldrán patas
Como las de un gallo o las de un cerdo
Que corren tras su felicidad para anunciar, alegre, un nuevo día
O para ir a revolcarse en la dicha de un chiquero, tan rápido
Que ni un solo segundo se atreva morir sin que lo haya
Disfrutado.

Así se vive plenamente una vida,
No buscando lo que necesitamos
Ni lo que queremos o lo que soñamos.
Sino vivir en libertad
Yendo con lo que tenemos y disfrutarlo
Sin hacernos esclavos de aquello
Que nunca nos ha hecho falta
Para estar vivos.