Hoy No

poema de Paulo Viteri

Desde el día en que naciste,
la muerte te ha asechado,
como sombra que persiste,
como un eco del pasado.

Te ha seguido en la brisa,
te ha susurrado al oído,
mas tu alma nunca se hizo
del temor, un fiel abrigo.

Y sin embargo, aquí estoy,
pero, no estoy solo, pues estoy con Dios,
quien me guía en la tormenta,
quien me alza en mi dolor.

Cuando el miedo se aproxima,
cuando todo es confusión,
su palabra me ilumina,
y me da su protección.

Te mira a los ojos,
te envuelve en su voz,
me sostiene con firmeza,
y me dice: "Aún no".