Mazazos
poema de Pablo
¡Qué presión ejercían obre mí
aquellos ojos marrones!
Eran como dos mazazos
a la fragilidad de mi barro seco.
Ella misma
acudió luego a retomarme,
a rescatar los trozos caídos por doquier
al pie de su mirada.
Al verme en aquellos ojos
me supe vivo,
desmoronado, pero vivo,
como quien halla el cuenco
donde vuelve a fraguarse su propia génesis.
Comentarios & Opiniones
como quien halla el cuenco
donde vuelve a fraguarse su propia génesis.
Tus escritos resultan my hermosos, buen día.
Penélope, María Cruz: muchas gracias por visitar estas letras y por dejarme sus apreciaciones. Saludos cordiales.
Una salvación,siempre amor, que hermoso! saludos y beso
Pablo, espectacular, bella obra, un abrazo querido amigo, linda noche
Silvia, Xio: muchas gracias por leerme.
Saludos fraternos!