Crepuscular

poema de Pablo

Ya van las horas taciturnas
alzando presurosas tales vuelos,
las horas cargando vanidades
perdiéndose en lo oscuro de los cielos;

y cómo crece en el ocaso la tiniebla,
como vierte en nosotros los bostezos:
día que pasa, lo mismo al ocioso
que a las manos cansadas del labriego.

La noche extiende ya su tela tan silente
y en su callar queda un remordimiento:
¡lo que no fue y pudo haber sido!
¡lo que quedó en la antesala del intento!

Comentarios & Opiniones

Silvia

Muy buenas letras,intensas, me gustó mucho saludos y beso.

Critica: 
Xio

Buena obra reflexiva, linda rima un placer querido amigo, un abrazo Pablo, linda noche.

Critica: 
Pablo

Gracias por pasar y dejarme sus impresiones.
Paz y mucho bien. Saludos.

Critica: