La consciencia que siente

El sol nada en la piel
Cuando el pensamiento también siente
Y la brisa maternal envuelve
Con su suave seda
El cuerpo que contiene al consciente

El aire, viajero contento
Entra en el paseo del alma sintiendo
Enseñándole aquello que a su frente ha sido posado
Para volverse paisaje pintado en la mente

La persepcion tiene encantos
Qué hacen del ciego un vidente
Y así va el alma mirando
Aunque su naturaleza es divina e invisible
Como la muerte

Comentarios & Opiniones

Penelope

Así es amiga, el poeta capta esa sutil diferencia perceptiva a través de sus observaciones que siempre van más allá de lo normal. Un abrazo!

Critica: 
Duropiso

Bellas letras Otiia. Me cautivó especialmente: "la naturaleza es divina e invisible como la muerte".

Critica: