EL DELIRIO DE UN GRAN AMOR.

Sus labios provocaban,

el delirio de una sublime tentación

mientras se renovaban los sentimientos,

de aquel apasionado y enamorado corazón

que palpitaba de locura por tanto amor,

para conjugar los sentimientos

que le devolvían la razón.

Era tan sublime aquella ternura,

que vivir a su lado era una adoración

sus miradas eran paso de luna,

como blancas plumas de gaviotas

y su piel extracto aroma del romance,

porque su cuerpo era como eterna primavera

en las románicas noches de luna llena.

Su pecho exhalaba ansiosas fantasías,

que parecían rutilantes estrellas

para iluminar aquella intensa pasión,

los suspiros eran como torres de esperanzas

que le devolvían la lozanía a los claveles,

para ver florecer una nueva y bella ilusión

que hace mucho tiempo dormía,

en un apartado rincón.

BARQUISIMETO VENEZUELA 06/01/2017.

AUTOR: ADJUNTA OMAR.

RESERVADOS LOS DERECHOS DEL AUTOR.

P/917.