A LA AMADA EN EL PUNTO CERO

Quiero empezar, porque me tengo que sincerar
Más allá de montes infinitos te dije una vez
Siempre pero siempre te voy amar.

Recuerdas aquella noche que te baje la luna
Te dije que así de bella eras
Y que la sangre que ella emanaba
Eran tus labios que yo anhelaba.

Recuerdas también que te puse en un altar
Te llene de flores y jazmines
Y todo tipo de velas aromáticas
Mientras te decía ¡oh mi hermosa, oh mi diosa!

¡Mentiras! – todas son puras mentiras.

No mi amor, no eres hermosa
Tampoco eres una diosa,
No te creas que eres mi inspiración,
No te creas que por ti nace mi canción,
No mi amor, te miento al decirte todo eso.

Porque los poetas rosas mienten tanto y tanto
Pero de los versos negros mujer
De esos versos que dan todo y a la vez nada,
Esos versos que dicen, que tu nombre mujer;
Ese nombre tuyo es la prolongación del infinito
El nombre de Dios volviéndose finito
Las estrellas contadas en un número exacto
Juntándose en un tierno pacto
Al cual, años luz después,
un alucinado lo llamaría ósculo.

Todo lo bello y tierno, es limitado, es engaño,
Una vil mentira de los poetas para sus mujeres
Y todo tipo de lectores que no leen,
Buscando en nuestras líneas
Algo hermoso para dedicar a la amada.

Porque tú eres la viva imagen de la beldad
Y ni afrodita en persona tiene esa cualidad
De ser el génesis de todo lo bello,
De ser la musicalidad en un corazón enamorado.

Comentarios & Opiniones

Silvia

Es muy hermoso!

Critica: 
María Cruz Pérez Moreno -acnamalas-

Excelente el desarrollo y el lenguaje. Me gustó. Saludos.

Critica: