NOS ENCONTRAMOS AMOR, SIN DARNOS CUENTA (continuacion del poema anterior)

Y te encontré mi amor, sin darme cuenta,
al doblar una esquina de la vida.
te soñaba, te pensaba, a cada instante,
¡bién sabía yo!!, que tú existías,
que en el ir y venir de tantas vueltas,
algún día, por fín, te encontraría.

Solamente las montañas no se encuentran,
aferradas a sus sitios para siempre,
más, las piedras que de ellas se desprenden,
en su loco girar, tal vez, un día,
rodando y rodando cuesta abajo,
quedarían frente a frente en el rellano,
descansando, juntas de por vida.

Del encuentro casual, de aquel momento,
en que el destino hizo su jugada,
de aquel loco deambular de nuestras vidas,
cuando a Dios preguntamos, ¿donde estabas?
cual las piedras que rodando se encontraron,
permanece la unión que nos ampara.

¿La pasión? ¡tal vez se fué!!, quedo haya lejos,
más, nos dejo un amor, consolidado,
un verdadero sentir, sin egoismos,
que lo da todo, no pide nada a cambio,
cada día que pasa lo refuerzo,
agradeciendo por todo lo otorgado.

Solamente las montañas no se encuentran,
aferradas a sus sitios para siempre,
más las almas, se encuentran, cual las piedras,
en sus giros, rodando cuesta abajo,
de por vida, eternamente permanecen,
quedando frente a frente, en el rellano.

Para mi querida Esposa.
Nicolás Ferreira.

Comentarios & Opiniones

Joelfortunato

Saludos. Un gusto es seguir sus obras.

Critica: