La gemela de mi sombra

¡Me enterado
de qué has hecho!
¿Creés que
estás a salvo
bajo techo?

Lo que has hecho
tiene nombre;
lo que has hecho
es traición.

¡Me enterado
de qué has hecho!
¿Creés que
estás a salvo
con tu cruz?

¡Me enterado

de qué has hecho,

así que

empezá

a correr!...

#

¿Qué es lo que está pasando allá afuera,
que, un segundo es un mundo en mi cabeza?
¿Qué es lo que está pasando aquí adentro
que, tengo tanto, pero tanto calor?

La gemela de mi sombra
se proyecta a deshoras
y me habla de la fianza
por ganarse mi confianza
y me habla de la fianza
de su gran retaliación.

No descansarás en paz
hasta que se agriete
entremedio de tu cráneo.
No descansarás en paz
hasta que lo diga yo.

La gemela
de mi sombra
se proyecta
y me dice

el progreso
es solo un mito
que decimos
que es real
y ocultar
así el hecho
que hace tiempo
nos rendimos.

La gemela
que es gemela
de mi sombra
se oculta
y me dice

¡... no estás
salvo acá
tenés que
irte de acá
no estás
salvo acá
te tenés
que largar...!

¿Yo seré
menos hombre
por llorar
o más humano
al hacerlo
al rezar?

¿Quién diría que, en la caja de Pandora,
hallaríamos al gato de Shrödinger?

Lo que risa fuera otrora
corrosivo llanto se tornó.

El progreso es solo un mito
que, despampanantes, nos decimos
para ocultar que ya nos rendimos.

El progreso es un convicto
que, tan campante, descansa, invicto
en las entrañas de una boa constríctor.

¿Seremos menos hombres porque lloramos
o más humanos por hacerlo al rezar?

#

No confundas nunca

nunca

nunca

nunca

mi paciencia

con clemencia

porque mi paciencia

tiene límite

y mi clemencia

ataúd.

No confundas nunca

nunca

nunca

nunca

mi paciencia

con clemencia

porque mi paciencia

tiene un límite

y mi clemencia

ataúd.

No confundas nunca

nunca

(...)

¿Quién diría que, en la caja de Pandora,
hallaríamos al gato de Shrödinger?

Lo que risa fuera otrora
corrosivo llanto se tornó.

El progreso no es sino un bucle sin fin

que estamos condenados a repetir

alternando disturbio y atril.

El progreso no es sino un cuento infantil

que cuentan ancianos a adultos a fin

de que a los niños puedan dormir.

No descansarás

en paz hasta

que se agriete

entremedio

de tu cráneo

cuando me harte

de meterlo

en las cuencas

de tus ojos.

#

No confundas nunca

nunca

nunca

ņ̶̌̃͒̓͑̀̀̔͘u̶̢̻͙̹͍̝̮̽̂̈̄ń̵̪̰̘̣̙̜̠̪̓ͅc̸̞̣͍͍̲̝̎͘͜͝͠͝a̸̢̮̤͉͈͇̠̜̿͋̉̾́̔̿̿́̂

nunca
m̸̞̾̉̎̄̃i̵͔̇́͛̽̑̿͜ ̴̧̧̦͇̙̔͌̐p̶̳̰̝̲͕̺̬̦̘̿͐̕͜ẵ̶̼͙͋̕͘͠c̸͎̰̘͈̝̠̖̺̙͐͆͘͠i̷̡͔̪̜͔̺̟̓̇͛̈́e̴̤̩̼͕̼̣̠͆̓ň̶̥̞̾̅͆͒̔̽̃̾͘ĉ̴͓͙͖̤̰͕͚̞͐͐̒i̷̧̘͉̭͖̱̠͕̗̿̅̐̾̽̈̇͂̚͝a̵͔̩͉̗͒̋̎̔̈́̾͑̽̕
mi paciencia

c̸̢̥̠̪̟̩̦̬͓͔̐̈́̄͠͠o̶̡̱̳̭͇̤̥̻͗̈́̊͊̍͗͗̌͝ͅǹ̴̛͖͇̭̹̬̎̈́̔̕̕͝ ̵̧̝͉̖͈͖̑̋́̚c̶̳͗̎̿̾͑͐̈́l̷̻̼̻̠͓͇̣̬̪̤̈͊͗̀́͝͝͠e̴̡̡̮̱̼̝̋͜m̷̡̛̫̟͈͖̖͊̔̾͜͝é̵̳̯̲̱̹̘̭͙̽͊̌̎̌̅n̷̨̟͚̩̻̮̗̋̿͂̔̏́́͗͆̎͜c̴̢̳͖͍̤̲͚͛̓i̵̡̛͔̭̱͈̖̺̔͗̃̉̓̇͒̆͘a̴͕̝̎͐͛̀̾̔͛̾͝
con clemencia

p̶̧̧̫̪̻͓̬̜̓͐̏̐ỏ̴͎͍̫͇̜̩̯̗̏͐́͝r̵̠̯̰̭͇̤̣̦͐͌͑͜q̸̝̩̔̏̂̚ṳ̵͉̲̫͒͊ḛ̷͉͛̍̐̃̋̊̈́̓̚ ̵̧̼͈̫̋͂͠ḿ̶̧̡̦͕͚̲͓̼̤ỉ̵̬̱̥̮͎̥͕̎͘ ̷̛̠̻̯̳͇̇̃͝p̶͉͇̼̗̼͚̲̈́̑͌̓̿a̴̰̬̬̻͚͍̭͓̾̓̈́̾̌̏͘͝c̵̲̼͕͕̱̽̇́͆ͅį̴̡̦̤̟̰͔̥͖͔̋̐̆̌͘̚͝͠e̷̤͙̼̔̒̾̑͆͊̽n̶̙͊̀̾͑̉̔͌͛c̴̢̗̞̠͈̿͛̓̒ī̸͉͔̲͔͎̔͛̀̇̄́ͅạ̷͐̾̽̎̉́͘͝
porque mi paciencia

t̵̞̭͔̣̰̻̩͓̓̉̆́̾͊̐̚ĭ̵̡̞̮̲̳̘̝͖͗͑ĕ̶͖͓̜̋̐̋̓͑̇̌̕͝ṋ̸͈͂͛͊̈́̾̎̈̕e̴͙͗͗̂̾̅̉̉̀ ̸̢̪͆̚ḻ̶̡̨̝̝̗̖̝̾̓̍̈́̓͗̐̋̃̕í̸̡̦̫̩͍̮̙̥̋̀m̴̡̪̭̻̽́̕į̷̡̛͓͖̪̦̫͓͈͋͋̽̈́̏̉͘t̶͍͍̺̹͚̋̑̆̀͑͗e̸̥̩̲͑͂ͅ
tiene límite

y̵̦̠̭̘͍͓̬̙̔̄̈͑̈́̒̚̕ ̴̜͈͎̺̪̙̋̋͘m̸̨̛̗̠̝̾̋͊̕̕i̴̼̱͑̀̿͂ ̵̰͕̰͎͍̺̂̀̈́̂̓ͅç̶̬̱͉͖̺͔̤͆̀̐͌ľ̷̼͓̱̝͍̯͎͎̜̋̍̽̃̇̍̈́͆͒͜e̴̘̩̹̟͓̫̖͒̽̋̔͠m̶̧̡̥̙͚̠͇͇͐̈́̋̽͒͑͝e̸̞̾͠n̶̡̞̠̜̥̙̲̻̿͂͌c̸̝̔͌̄̍͊̌͆͠͝͝ͅḯ̵̼̠͈͂͌̈͊̚a̸̧̫̮̫̎͑̎̊̊͗̆͝
y mi clemencia

ą̴̛̦̞̲̹̲̠̞̞̜̂͋́̀͝t̵̲̣͗̏̋̔̚͠ͅẫ̷̛͙̠͐̋͂͛̕͘ú̶̧͔̰̟̣̻̍̆̈́̾̈̈́̚ď̴̥̙̜̺̻̿͗̊̓̀̏͜.̶͕̝̺̉

Lo que risa fuera otrora
corrosivo llanto se tornó.