El Incierto tiempo

El tiempo me deshoja como un árbol en otoño,
llevándose personas y recuerdos con él;
algunos que quizás me hicieron mucho daño,
pero ahora no son más que ecos del ayer.

Tú, como una flor en un cerezo marchito,
eras mi esperanza de volver a creer,
creer en un amor que ya estaba apagado,
pero que tú, un día, volviste a encender.

Fuiste las raíces de mi savia en un intenso invierno,
guardándome calida para volver a florecer.

Florecí como nunca antes lo había hecho,
pero al poco tiempo todo se echó a perder,
perdido por la culpa del incierto tiempo
que nos juntó para luego separarnos otra vez

Hoy solo soy como un cerezo herido,
esperando paciente el tibio abrazo del sol,
que me devuelva vida tras el frío invierno,
Para que vuelvan a ver mi corazón .