Era Fléxil
A veces no nos damos cuenta de que la vida corre en cada segundo o por cada parpadeo que biológicamente tenemos, para evitar que las lágrimas se luzcan. Amanecer con las noticias inesperadas, o ver salir un sol sin verano o percibir ante sí una prisa sin reloj. Escuchar el murmullo de la brisa, observar algo de lluvia o quizás nieve en el parabrisas, descansar en el dolor o despertar en la alegría. Sentir el día a día, con una sonrisa, o una amarga esperanza disfrazada de hipocresía. Son las semanas que comienzan, los meses que terminan, el año que se avecina y las mil cosas cubriendo tus espinas. Y ves por ver, cada esquina es una espera, un tiempo más a la certidumbre de lo que no llamas, pero llega. No se cuentan los aplausos desde donde sea, pero todos los días sales a escena, y es ahí, en ese teatro que encarnas, los papeles de la vida que le rinde homenaje a tu mayor pasión: vivir por vivir, vivir por obsesión, vivir por sentir que cada aplauso tiene algo de inspiración. Ese secreto acuñado en los sueños anhelados y ese sentir expirado en los momentos menos afortunados. Es ahí cuando pierdes la cabeza, o te llevas la mano a la cabeza para detener los pensamientos en vano. Y vuelves a escuchar los sonidos mezclados: un carro encender, una sirena enternecedora, una alarma que ni caso haces, y es ahí cuando un cantar del canario, un rayo de la aurora cambia la debilidad por energía; decides comerte el mundo, antes que el mundo te devore a ti. Pisa, pisa, sin dejar atrás la risa; no opaques la dicha de ser feliz, para que no quebrantes tu vida. No desperdicies su tiempo, porque en cada detalle hay un espejo, esperando ver el mejor reflejo de la persona más singular que existe. Y no importa cuántas veces te veas una arruga o una marca, no importan las cicatrices, unas más oscuras, otras más blancas; lo que define tu semblante eso tendrá todo tu día, los que cargues en tu alma esos tendrás para tu noche, y así vamos cubriendo una despedida, desde el amanecer hasta otra noche, desde lo más sutil que puede ser un vuelo, hasta aceptar el mejor o peor consejo, todo y siempre, por cuanto podamos llegar a viejos.
Comentarios & Opiniones
MARÍA
La profundidad de tu mensaje va trazando escalones desde donde tu objetiva visión, desnuda a Cielo Abierto, diversas etapas que a toda/s, nos toco vivir, cubres con exactitud y esmero cada uno de los item que conforman todo un resúmen //
// de apreciaciones que ayudan a reflexionar sobra cada una de esa circunstancias, dando en tu epilogo una inyección de optimismo en cuanto a enfocar desde otro ángulo, la posibilidad de despegar de esas etapas adversas, con el fin de superar //
// la situación y mirar de frente el futuro como un oasis de liberación y superación de todo aquello anterior expresado.
Intenso, místico, y realista, el contenido de tu obra.
Mi cariño para ti, amiga, cuídate.
PLATINO
Buena presentación. Se nota una frustración ante las espectativas de vida, de gozo y felicidad, cual si llevaría al único camino de vejez y tal ez la tumba.
Pero no se debe olvidar que toda ley aostumbrada entre los hobres tiene excepciones. Y no
vale dejar de soñar, no sirve arrojar la toalla desesperdamente. Que hay desviaciones, otros rumbos mejores, pero que piden dejar, abndonar el equivocado antes que sea tarde y ya no sirva para enmendar.
Cordiales saludo.
Y hasta nueva obra.
MARÍA.
Seria respetuoso y elegante que así como nosotros nos detenemos en tu obra, lo correcto seria tener de tu parte una devolución a dichas visitas, tu tiempo vale como el nuestro, revisé tus presentaciones anteriores, y el mismo silencio //
// ronda en todas ellas, salvo que te creas una Luminaria en Literatura, y no te agrade nada de lo simple expuesto en evaluación, pues no honran tus trazos presentados.
La cortesía y educación, así lo pregonan, es una ética de vida
PLATINO
Hola María, estupendo recuento de ese paso diario por nuestras vidas, así para todos, somos actores en este camino que nos ha tocado transitar, abrazos cordiales, feliz día.
Respetable mujer, encuentro la lectura de vuestras letras elocuentes, instrospectivas, sinceras. Todo un gusto de lectura.
Reciba cordiales saludos.
El tiempo el mejor compañero hay que valorarlo sin escatimar .la vida una bendición del cielo , bella María , saludos.