Gala

Te extraño, extraño la suavidad de tus palabras, lo fuerte de tus abrazos y la calidez de tu presencia, te extraño como la tierra extraña a la lluvia durante la sequía, eres una herida que no cierra, que se abre con el alba y agoniza en mis madrugadas trasnochadas, eres eso que como penitencia de infame condenado siempre dolerá y siempre amaré.