Mía
Para Ady...
Eres mía... Aquí eres mía.
En este cielo vasto y estrellado,
que mi delirio para ti ha inventado,
cautiva, te tengo retenida.
Prisionera de mi deseo desvelado,
a merced estás de mi utopía.
Arde en mi alma la hoguera del verano
a donde emigra tu corazón de golondrina.
Eres mía... sólo mía;
proclama el campanario en lo más alto.
La soledad perfuma el aire de mastranto,
al despedirla con un beso en la mejilla.
Eres mía... inexpugnablemente mía:
tu frente de nácar, tu sonrisa de nardos,
tu figura altiva, tu mirada de misterio indescifrado.
Mía, como es de tu andar la belleza y la armonía.
Rota la lira y proscrito el canto,
si tú no existieras, no habría poesía.
Pero colmas con tu gracia el otrora desencanto,
y soy feliz porque aquí, eres mía.