Vivificantes sus notas

Mi amor por la música lo quiero confesar
no es algo que me atrapa ni adicto me hace ser;
lo clásico me gusta y siento gran placer
oír las sinfonías de beethoven, de Mozart.

Conciertos y sonatas de piano o de violín
transportan nuestras almas a un bello paraíso;
envuelven nuestras mentes en un divino hechizo,
te pierdes en un cielo de belleza sin fin.

Eso es bello, hermoso, es atrayente
es una paz inmensa que sentimos vivir,
inmerso en esas notas es bello hasta morir
lo clásico es lo máximo, definitivamente.

Luis Varela Luzardo